Republica del Congo - El camino es culebrero

Llegamos a la frontera y aqui en las tres oficinas de inmigracion, aduana y control policial, dejamos detallados los mismos datos en sus libros de control, todo esto en mas o menos 1 hora, ritmo africano.
Hablar aqui de rutas es atrevido, asi que fuimos haciendo los kms en caminos que iban entre una foresta que cambiaba entre selvatica y de sabana, realmente hermoso asi que tranquilos disfrutando del paisaje. Ya caido el sol estabamos en Kibango, una aldea con no mas de 50 casas y por supuesto su puesto de control policial, que nos recomendo un pequeño albergue adonde nos dirigimos. Despues de improvisar una forma para entrar la moto a lo que era el restaurant, comimos un pan con sardina, un termo de agua y caimos rematados en la cama.
Al dia siguiente armar nuestro rompecabeza y buscar un lugar para tomar algo de desayuno y ver como llegariamos a nuestro proximo destino que era Pointe Noire, ya que la informacion que poseiamos era que la ruta que pensabamos tomar estaba en mal estado, suerte!
El chico del albergue nos habia dicho que despues de 9 kms nos encontrariamos un puente y despues de cruzarlo tomariamos a la derecha, pasados los 9 kms no estaba el puente pero habia un cruce donde compramos pan, sardinas y donde preguntamos por el camino, nuevamente factor sorpresa, porque el camino que teniamos en nuestro mapa y que era el que debiamos cruzar el puente y eso era unos kms mas adelante, ellos aseguraban que estaba abandonado y que todo el mundo tomaba el nuevo camino que era justo en ese cruce donde estabamos, bueno asi alli vamos. Aqui comenzo la aventura, desde lugares donde habia tanta tierra batida que no veias por donde ibas, que estaba lleno de piedras y donde nos encontramos con una caida, por suerte yo me habia bajado para facilitarle a Reto el balance porque era en una subida y que ademas en ese momento aparecieron unas mujeres que enseguida nos ayudaron a levantarla. Despues aparecio la bendita arena, y aqui comenzo mi peregrinacion ya que los dos en la moto no era posible andar. El paisaje cambiaba y los unicos que vimos andar por aqui fueron camiones y tambien los que cargan con la madera, despues de no se cuantos kms nos introducimos en la selva donde las grandes maquinas bajan la selva que luego sera sustituida no se si por un buen asfalto o es solo para facilitar la salida de los grandes arboles. Seguimos en el factor sorpresa ya que las maquinas eran conducidas por asiaticos en un momento paramos y alli preguntamos de donde eran y venian de Malasya, y es la empresa que se encarga no solo de esto sino de todo lo que tiene que ver con el negocio de la madera, como alla ya la selva la bajaron y han puesto en peligro de extinsion a los orangutanes, ahora estan aca y dejaran en el mismo estado a los gorilas, se me pone la piel de gallina, por desgracia el ser humano no deja de sorprenderme y mas que nunca me siento mas animal.
Dejamos atras la selva y nuevamente la arena y la hora paso y el sol se puso y todavia estabamos a unos 60 kms de nuestro destino. Estabamos en el medio de la nada solo a nuestros costados oiamos voces y veiamos fuegos prendidos, debiamos tomar una pausa para poder retomar el camino de arena, el camino es culebrero… el camino es culebrero…, cumbia vieja pero que bien describia la situacion.
Para un camion y de su techo baja un monton de gente, de la cabina tambien y todos preguntando si teniamos un problema, despues de un rato de charla nos dicen que en tan solo unos pocos kms estaba ya el asfalto, eso fue como el gran empujon para la continuacion. En el asfalto estabamos como en una pista de deslizamiento, reiamos. Pasamos alli pasamos por un pueblo donde hicimos una pausa para tomar algo y ver si podiamos cargar nafta estabamos en reserva y todavia faltaban 40 kms, pero no habia.
Cuando estabamos en Pointe Noire, primero que nada cargar nafta estabamos andando con el ultimo aliento, y despues ubicar el lugar para quedarnos, aqui otra vez en situacion jodida pues la ciudad era grande y no teniamos mapa para ubicarnos y tampoco hay un puto cartel para saber donde estas parado. Y en un cruce que paramos un taxi para preguntarle que nos indicara la direccion a tomar y aparecio una camioneta blanca con Edgard que seria nuestro guia durante la estadia en esta ciudad. Del club Nautico a la mision sueca, de aqui a la mision catolica y finalmente terminamos en el Ejercito de Salvacion, descargamos nuestras cacharpas, baño para sacarnos el polvo que teniamos encima y salir a buscar algo de comer, terminamos en un kiosko de un nigth club donde no solo comimos riquisimo sino muy barato, fin del un dia donde el promedio de marcha fue de 28 kms en la hora.
Solo 2 dias aqui y pudimos desgustar unos buenos bizcochos en una panaderia y luego unas cervezas con Edgard en una recorrida que hicimos de la ciudad y donde conocimos su lugar de parada. Aqui conversamos sobre la situacion de Congo un pais que posee petroleo, diamantes, oro y otras riquezas, eso si la mayoria de la poblacion no accede a ningun servicio basico, y aqui en esta ciudad se ve realmente ese desequilibrio de una forma tan descarada porque se encuentran todas las empresas petroleras con empleados venidos la mayoria del exterior y con sueldos no en CFA sino en dolares, como dijera nuestro amigo del canal 10 – asi esta el mundo amigos –
Besos mil y seguimos en ruta.